La familia de los córvidos: El misterio del rabilargo (I).

El rabilargo ibérico (Cyanopica cyanus)

Orden: Passeriformes.
Familia: Corvidae

En la Península Ibérica tenemos una gran variedad de aves de la familia de los córvidos; el cuervo (Corvus corax), la grajilla (Corvus monedula), la corneja (Corvus corone), el arrendajo (Garrulus glandarius), la urraca (Pica pica), la chova piquirroja (Pyrrhocorax pyrrhocorax), la chova piquigualda (Pyrrhocorax graculus) y nuestro protagonista de hoy, el rabilargo (Cyanopica cyanus)

   Fotografía 2: Grajilla.

   Fotografía 3 Urraca o Picaza.

Los córvidos son aves de mala fama, oportunistas, carroñeras, ovívoros, pero los miembros de este grupo ornítico estan considerados como unas de las aves más inteligentes, son sumamente adaptativos y desempeñan un papel fundamental en la ecología.

Morfología: El rabilargo es, a todas luces, uno de los córvidos mas hermosos y el de menor tamaño de la Península Ibérica. La cabeza y el pico son negros, como el resto de córvidos, (excepción hecha del arrendajo) y la cola, que le da nombre, es larga y azul (200 mm). 

    Fotografía 4. Detalle de la cabeza de un rabilargo.

    Fotografía 5: detalle de la cola del rabilargo

Las alas son azuladas y el cuerpo es de tonos pardos-marrones, con una mancha mas clara en la  zona de la barbilla. No hay grandes diferencias entre adultos y jóvenes.
Tiene una longitud de 35 cm y una envergadura alar de unos 40 cm.

Hábitat: El rabilargo, en la Península Ibérica, vive en el cuadrante occidental y centro. Habitante de las dehesas, no duda en acercarse a los parques de zonas urbanas en su busca de alimentos.

                                        Rabilargos en áreas urbanas.

Biología: El rabilargo (Cyanopica cyanus) es un ave gregaria que forma grupos más o menos numerosos. Son aves sedentarias, que ocupan un territorio extenso del que no suelen salir. En el mes de abril-mayo comienzan la época de reproducción, donde la pareja de rabilargos construye un nido, en forma de copa, compuesto de ramitas secas en la base, líquenes, trapos, papel y tierra apelmazada. la puesta consisten en 5-6 huevos que serán incubados una media de 17 días.

Alimentación: El rabilargo ibérico es omnívoro, si bien en primavera y verano, coincidiendo con la puesta y la cría de los polluelos, sus preferencias alimentarias son los insectos. Semillas, frutas e incluso carroña constituye su nutrimento. Es frecuente observarlos en el suelo, prospectando lombrices de tierra y larvas, o en el tronco de los árboles, buscando orugas.

Protección en Extremadura: El legislador extremeño encuadra al rabilargo ibérico en la categoría de "Interés especial".

Los amigos de este blog habrán observado que he titulado la monografía de este martes, dedicada a este hermoso córvido, como "el misterio del rabilargo" y, ciertamente, no he hecho alusión a nada misterioso en la vida y costumbres de estas aves.  No es olvido del autor. Emplazo a los curiosos lectores  de este blog a esperar una semana para desgranar uno de los misterios más fascinantes de la avifauna ibérica y que trae de cabeza a los ornitólogos. Paciencia pues.

Todas las fotografías son del autor del blog quedando prohibida su reproducción sin su expreso consentimiento.

El nido de la cigüeña

    Fotografía 1. Pareja de cigüeñas negras en el nido.

Amanece en Monfragüe y un año más, la pareja de cigüeñas negras (Ciconia nigra) de la Peñafalcón construyen su nido en un saliente rocoso, a escasos metros de la superficie de las aguas del río Tajo. Tras una migración de miles de kilómetros, suelen llegar a la Península Ibérica en los meses de febrero y marzo.

   Fotografía 2. Vuelo nupcial de la cigüeñas negra.

Entonces es posible ver a la pareja de cigüeñas negras en vuelo nupcial, llenando los cielos de Monfragüe. Acondicionan el nido con aportes de ramas y materia vegetal que encuentran en las proximidades del nido. 

Mientras un miembro de la pareja busca los aportes de materiales necesarios para la construcción de la plataforma del nido, el otro miembro permanece en el nido a fin de que otras parejas de cigüeñas negras Ciconia nigra) no se apropien del mismo.

En esta época del año, la actividad de la siempre esquiva cigüeña negra es febril. He observado muchas veces como se afanan en buscar un lugar idóneo donde poder construir el nido y acondicionarlo, a fin de tener más probabilidades de sacar adelante la pollada.

En las fotografías siguientes, un momento difícil de observar, la cópula.

La actividad de la pareja de cigüeñas negras (Ciconia nigra) concluye con una puesta, que suele ser de de 2 a 5 huevos, que incubarán durante 38 días aproximadamente, bajo la atenta mirada de los buitres leonados.

Este nido que observamos y que parece un emplazamiento tranquilo y muy apropiado esta, sin embargo, en peligro.  Situado a pocos metros de la superficie, -como se observa en la fotografía inferior-, la subida del agua embalsada constituye un factor de riesgo evidente para esta especie.

Una vez los pollos han nacido, alguno de los adultos siempre permanece en el nido a fin de salvaguardar la nidada de las inclemencias del tiempo y de depredadores naturales, mientras el otro adulto provee de alimentos a los polluelos. 

la cigüeña negra ibérica es una especie en peligro de extinción, por lo que el amigo de este blog sabrá apreciar la importancia de este documento gráfico que hoy les muestro.

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El retorno de los cernícalos primilla

Orden Falconiformes, familia falconidae.

Como cada año, acude puntualmente desde su cuartel africano un pequeño y hermoso cazador, el Cernícalo Primilla (Falco naumanni). Extremadura, sus pueblos y ciudades, se ha convertido en uno de los principales refugios de este pequeño halcón en Europa, con una población que ronda el 18 % de la población de los primillas.

Una de las características fundamentales del vuelo de este pequeño predador es su capacidad para cernirse (del verbo cernir proviene el nombre del ave: cernícalo), su capacidad, digo, de sustentarse en el aire, fijando su objetivo antes de lanzarse, como un resorte, sobre la presa; algún desafortunado ortóptero (grillos, saltamontes...) o algún paleóptero (libélulas...).

Inmediatamente capturada la presa, la transporta en la pinza de su pico al nido, sirviendo cualquier oquedad, bajo las tejas o en grietas de los edificios para la puesta y crianza de la prole.

El moderno birdwatching, (o como mejor podríamos decir en viejo castellano; el observador de aves), armado de sus prismáticos, su cámara fotográfica, su telescopio terrestre y sobre todo su paciencia, podrá mirar y admirar junto a los cernícalos primillas, otras aves urbanas. Así, podrá sorprenderse gratamente de observar una bandada de Grajillas occidentales (Corvus monedula). Córvidos inteligentísimos, de ojos glaucos, de los que prometo contarles su vida y costumbres en otro momento. 

Volviendo sobre nuestro protagonista, se recorta en la bóveda celeste su afilada figura, su amplia cola compuesta de 12 plumas timoneras, adornadas de una amplia banda negra, su cabeza azulada en los machos, llenando el aire con su estilizada silueta de depredador.

Como cada año, acude puntualmente desde su cuartel africano un pequeño y hermoso cazador, el Cernícalo Primilla (Falco naumanni), y como cada año, uno los recibe como se reciben a los amigos. Pequeños amigos que han cruzado el Sahara, amigos que crían su prole en los huecos y grietas de nuestros pueblos y ciudades, amigos que ayudan al agricultor controlando las poblaciones de insectos. Amigos que un buen día, cuando sienten que el frío empieza a apretar, cruzan el estrecho y se van. ¡Hasta la siguiente primavera!.  

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